martes, 1 de septiembre de 2009

Las horas extras frenan la creación de miles de empleos en plena crisis

La realización de millones de horas extraordinarias frena la creación de miles de puestos de trabajo en la economía española, según revelan las estadísticas oficiales sobre esta modalidad de prolongación de la jornada laboral. Aunque se han reducido con la crisis, los sindicatos denuncian que muchas empresas en regulación de empleo recurren a esta fórmula, lo que en su opinión constituye una «flagrante ilegalidad». En otras ocasiones, se trata de compañías que se han pasado de 'frenada' a la hora de ajustar su plantilla en los últimos meses y se resisten a realizar nuevas contrataciones ante la incertidumbre generalizada, añaden.
Los datos de los últimos cuatro trimestres conocidos -abril de 2008 a marzo de 2009- indican que los trabajadores españoles realizaron casi 59 millones de horas extras, que equivalen a más de 36.000 puestos de trabajo según la jornada media realizada en el mismo periodo, de unas 1.612 horas anuales, incluidos los empleos a tiempo parcial.
En el País Vasco, donde el recurso a las horas extras es algo inferior al del conjunto del país, el número de empleos 'ocultos' por esta causa supera los 1.800, aunque en este caso se trata de una cifra en rápido descenso, en especial en el primer trimestre de 2009, cuando cayeron el 39%, hasta las 496.500 frente a las 817.600 de un año antes.
Cuestión de 'ética'
No son una cantidad importante de puestos de trabajo comparados con los que se han destruido -1.311.000 en España y 51.400 en Euskadi en el mismo periodo-, pero la existencia de esta 'disfunción' social adquiere para muchos observadores una «dimensión ética» ante la carencia de ocupaciones que ha provocado la crisis económica.
Con todo, los datos oficiales sobre horas extras, extraídos de la Encuesta de Coyuntura Laboral que trimestralmente realiza el Ministerio de Trabajo, no se acercan a la realidad del país, según coinciden diversas fuentes consultadas. Por un lado, la propia limitación legal frena a los empresarios a la hora de declarar todas las que se realizan. Por otro, el hecho de que tengan que cotizar a la Seguridad Social y por IRPF como las horas ordinarias -salvo las de fuerza mayor- induce en muchas ocasiones a los empleadores a buscar fórmulas alternativas de asignar los ingresos a los trabajadores para soslayar esos gravámenes. Conceptos como dietas o transporte encubren muchas veces el pago por la prolongación de la jornada. Otras veces se remuneran como 'primas especiales'.
Caída con la crisis
Pese a todo, el descenso de las horas extras ha sido significativo tras el estallido de la crisis económica durante el pasado año. Según el departamento que dirige Celestino Corbacho, alcanzaron su cenit en España en 2007 con casi 64,5 millones. El mínimo fue en 2001, con 55,3 millones. En la comunidad autónoma vasca, el máximo de los últimos diez años se anotó en 2002, con casi 3,3 millones, y el mínimo en 2006, con 2,6. Sin embargo, Euskadi ha registrado un acelerado descenso en el primer trimestre del año, hasta situarse en una media de 0,9 horas por cada trabajador ocupado a tiempo completo, frente a las 1,2 del conjunto de España, lo que constituye la distancia más alejada de la década.
El aumento del paro ha llevado de nuevo a las centrales sindicales y a otros sectores sociales de izquierdas a retomar la aparcada demanda del reparto del trabajo. La supresión de las horas extraordinarias sería la forma menos lesiva de aplicar esta fórmula, aunque su coste para las empresas, según las últimas estadísticas conocidas, sea algo inferior (15,81 euros frente a 17,62) al de la hora ordinaria.
Reparto del trabajo
La reivindicación del reparto del empleo es el argumento de los sindicatos para pedir una mayor intervención de la Inspección de Trabajo en el control de las irregularidades que se producen. Así lo ha señalado Javier López Irisarri, responsable de negociación colectiva de Comisiones Obreras de Euskadi, quien, tras reconocer que no se trata de incumplimientos generalizados, denuncia que su central ha constatado que algunas empresas de la industria y la construcción «se resisten a levantar» los expedientes de regulación de empleo y optan por las horas extras para cumplir sus objetivos. Algo «totalmente ilegal», subraya.
Pedidos no esperados y la organización de las vacaciones de la plantilla han sido las principales causas que han llevado a esta situación, explica. En algunos casos, los trabajadores en regulación de empleo no han podido acudir a los cursos de reciclaje que se imparten mientras tienen suspendido el contrato por las horas extras que han llevado a cabo. Incluso hay situaciones particularmente graves en la construcción, como la de una empresa que trabaja en una obra emblemática de Bilbao y que, según CC OO, hace horas extras «a tutiplén» tras despedir hace poco a medio centenar de operarios.
El sindicalista considera también «inmoral» que otras firmas del sector servicios y de montaje que no están en regulación hayan renunciado a contratar nuevos trabajadores para cumplir sus objetivos y recurran a la prolongación de la jornada.
Las horas extras y la regulación de empleo pueden contribuir a un otoño «caliente», alerta López Irisarri, y una opinión similar mantiene Felipe García, de la ejecutiva de UGT-Euskadi. La central socialista también ha constatado la existencia de empresas, en especial del sector del metal, que no tienen capacidad para hacer frente a los pedidos que les entran y que recurren a esta fórmula. «Se están haciendo cosas muy raras».

Publicado en: http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/20090830/economia/horas-extras-frena n-creacion-20090830.html

No hay comentarios:

Google